10 cómics steampunk que deberías leer

Como ocurre con el cine y la literatura, el cómic no se ciñe a un único género. Hemos visto cómics de terror, western, ciencia-ficción, fantasía heroica… pero hay otro género que también se ha abierto camino entre el público lector. Nos referimos al género steampunk.

Posiblemente nunca hayas oído hablar de este término, y es normal. Formalmente, se acuñó en la década de 1980 por el escritor K. W. Jeter al calor de una serie de novelas que surgieron en esa época. Se proponían cómo en un periodo ficticio, que abarcaba el siglo XIX y principios del XX, la tecnología de vapor conseguía resultados muy por encima de sus posibilidades reales: máquinas voladoras, tanques funcionales, armas de plasma, autómatas sintientes, etc…

En esencia, tampoco es que este tipo de literatura o cine sea nueva. Julio Verne, H. G. Wells y el escritor español Enrique Gaspar y Rimbau ya habían propuesto muchas de ideas básicas del steampunk en sus libros entre 1840 y 1910. Por lo que estaríamos ante un subgénero de la ciencia ficción del que luego partirían otros tantos subgéneros posteriores.

No obstante, algo parece tener el periodo victoriano y la tecnología de vapor, que sigue fascinando a manos escritoras e ilustradoras de todo el mundo. Por eso, en los siguientes párrafos vamos a hablar de varios cómics steampunk que podéis encontrar publicados en la actualidad.

No es la primera vez que Marvel coquetea con el steampunk, pero sí que podemos destacar que es una novedad fresca el cómo lo está haciendo en “Edad Oscura”. Esto es, mediante un cómic distópico que desarrolla un Universo Marvel que se queda sin electricidad y debe regresar a la fuerza a la tecnología de vapor.

Un resumen muy tosco de esta obra, cuyas primeras impresiones publicamos hace un tiempo, es un “Julio Verne meets Mad Max & Spider-Man”. Estamos ante un escenario postapocalíptico que mezcla steampunk y superhéroes de forma ágil y divertida, tomándole el pulso a la actualidad comiquera.

En el momento que escribimos esta líneas, se encuentran publicadas ya la primera, segunda y tercera entrega de este relato, que constará de seis episodios. No obstante, en un futuro podríamos verlos reunidos en tomo recopilatorio. ¡Así que ten los ojos muy abiertos!

Como solemos hacer, te damos una de cal y otra de arena. Mucho antes de que la Casa de las Ideas entrara al juego del steampunk, DC ya lo hizo. Fue con el cómic de “Gotham a Luz de Gas”, en el que proponía qué hubiera pasado si Batman hubiera aparecido a finales del siglo XIX. Esto, por cierto, sería el inicio oficioso del sello “Otros Mundos”, que desarrollaría versiones alternativas del Multiverso DC, tales como el afamado “Hijo Rojo”, por ejemplo.

Hay que decir que este Batman victoriano es un steampunk “muy blandito”, pero sí apunta maneras al proponer ideas de este tipo de subgénero, que desarrolló en su secuela y que también vimos en el cómic “JLA: La Era de las Maravillas”. Además, por cariño y por lo que significó en su momento, creemos que debe ser uno de esos cómics de Batman que deberías leer.

¿Te imaginas la I Guerra Mundial con dragones y máquinas de guerra a vapor? No lo hagas: ya lo hicieron en su momento Kurt Busiek y nuestro Carlos Pacheco en su memorable “Arrowsmith”, en el que Columbia (USA) y Prusia luchan empuñando magia y tecnología imposible.

“Arrowsmith” se encuadra dentro de esas obras “inacabadas” de los años 2000, como ocurre con el “Battle Chasers” de Madureira (un amerimanga de fantasía oscura con muchos ingredientes steampunk), debido a su carácter de serie limitada. Afortunadamente, su secuela y su conclusión llegarán pronto a las librerías de todo el mundo de manos del sello Image.

Ya te dijimos que Julio Verne era uno de los padres del steampunk, como lo era también Wells, ¿verdad? Eso mismo debieron pensar en su momento Alan Moore y Kevin O’Neil al crear un “supergrupo” formado por los héroes de la literatura decimonónica en su extraño pero insigne “La Liga de los Hombres Extraordinarios”.

Cuando un criminal internacional amenaza con iniciar una guerra contra el maquiavélico Fu-Manchú, un grupo liderado por Mina Harker (“Drácula”) y el Capitán Nemo (“20.000 Leguas de Viaje Submarino”) deberá unir sus fuerzas para evitar el cataclismo que el choque de ambos señores del mal pudiera provocar.

Si bien este cómic nació en un escenario netamente steampunk, evolucionó hacia postulados de Ci-Fi más duros. No obstante, debido a cuál es su origen, creemos que debemos mencionártelo como obra dentro del género.

Bill Willingham (“Fábulas”) es un autor que ha entrado al trapo en historias que van más allá de las versiones de realismo fantástico del Lobo Feroz y Jack el “Matagigantes”. Una de sus incursiones en el género del steampunk es “Legenderry”, una obra dibujada por Sergio Dávila.

“Legenderry” es un crossover de franquicias que poseía la editorial Dynamite hacia 2015 y que incluían a versiones steampunk de Flash Gordon, Red Sonja, Vampirella, Green Hornet, El Hombre Enmascarado (The Phantom), El Zorro… quienes formaban equipo ataviados con prendas victorianas.

Por múltiples motivos, nos recuerda a una réplica de Willigham al anterior título de esta lista. Pero también es una obra interesante y atrevida. Es una lástima que actualmente esté descatalogada en español. No obstante, esperamos que se reedite en un futuro no muy lejano.

Sería injusto no mencionar un manga claramente steampunk como es “Fullmetal Alchemist”, en donde los automails (prótesis cyborg a vapor) juegan un papel muy importante. Sobre todo, en lo tocante a sus dos protagonistas, los hermanos Edward y Alphonse Elric.

Al margen de su valor como obra enmarcada dentro del steampunk, este manga de Hiromu Arakawa es uno de los shonen más completos de los últimos 20 años. Tiene de todo: aventura, magia, humor, horror y un escenario muy trabajado y redondo.

Cabe decir, además, que la labor de investigación de su autora para definir a sus personajes y para definir las reglas de la alquimia, en base a tratados reales del Renacimiento, son tremendos. De ahí que te recomendemos esta obra fervientemente, independientemente de si buscas o no algo expresamente steampunk.

“Ehkö: Mundoespejo” es una obra que os recomendamos recientemente en el artículo dedicado a 10 grandes cómics protagonizados por mujeres. En ella, Arleston y Barbucci nos proponen un híbrido de cine fantástico de los 80 y del género steampunk, que aglutina algunas ideas de títulos que contaron con la colaboración de Jim Hemson y de sus marionetas.

“Ehkö” es el relato de Fourmille y Yuri, quienes a principios del siglo XX viajan a un mundo alternativo poblado por criaturas mágicas como dragones, que conviven con tecnología a vapor y que eclipsan los resultados de la ciencia moderna de nuestra realidad.

A lo largo de todos los tomos publicados, el dúo creativo explora y rinde homenaje a elementos de la sociedad y la cultura del periodo comprendido entre 1900 y 1930, recuperando moda, música y discursos de la época. Por ello te la recomendamos como obra visual y narrativamente muy atractiva.

Hauteville House era el nombre que recibía el hogar del escritor Victor Hugo durante su exilio y que este sea el título del cómic que nos ocupa no es casual, ya que la historia de este relato se desarrolla en pleno auge del Emperador Napoleón III.

“Hauteville House” es una obra de Fred Duval, Christophe Quet y Thierry Gioux en la que un grupo de rebeldes republicanos se enfrentan a los servicios de inteligencia del Imperio Napoleónico por el control de nuevas formas de tecnología experimental, cuya aplicación en el campo bélico podría cambiar de forma irremediable el mapa europeo.

Visualmente impactante y partiendo de un buen estudio histórico, esta obra no debería pasar desapercibida para los amantes del steampunk y de las tramas de espías, así como a los apasionados del siglo XIX.

Jean-Yves Delitte, pintor oficial de la marina francesa, nos propone una obra que homenajea a Julio Verne y a su producción literaria dedicada a los viajes por mar en su “Neptuno”.

En este cómic, nos cuentan cómo el inventor William Lake finaliza un prototipo de submarino funcional más avanzado que el real de Isaac Peral. Sin embargo, el gobierno de EEUU no desea comprarlo ni invertir en él.

Con el proyecto naufragado, Blake recibe una oferta por parte de un inversor alemán, que desea financiar la nave, bautizada como “Neptuno”. El magnate insiste en que solo desea usarlo para realizar un viaje por el Mar Caribe. Sin embargo, sus intenciones pronto resultarán mucho más enrevesadas y oscuras de lo que inicialmente se pactó…

Y de un homenaje a Verne a una adaptación de uno de los libros clave del género: “La Máquina del Tiempo”, en la que el autor de “El Hombre Invisible” plasmó las bases generales del viaje a través del tiempo, utilizando una máquina.

La presente edición de Norma resulta muy interesante, sobre todo por la excelente narrativa y la calidad de las ilustraciones. Aunque como cómic steampunk no es muy destacable, sí merece la pena tenerlo en cuenta como excelente adaptación de una novela original.

Con esto acabamos. No obstante, nos dejamos algunas obras más en el tintero que, por cuestiones de espacio, debemos dejar fuera. A saber, algunas de ellas son el “Steampunk” de Joe Kelly, la versión steampunkera de “Battlestar Galactica 1880” o “El Legado del Diablo”, por citar tres títulos.

Si quieres descubrirlos, te animamos a que nos visites ya mismo en nuestra tienda de Akira Comics. ¡Te estaremos esperando!