Siguiendo un plan secreto, Maomao hace que aparezca una hermosa hada de la luna en el jardín de los melocotones bajo la luna menguante, en una fiesta en la que se agasaja a las dos enviadas especiales del extranjero.
Tras la marcha de las enviadas, Maomao empieza a preocuparse por los aceites aromáticos que se han introducido en el palacio interior a través de la caravana de comerciantes.
En este volumen, para resolver un nuevo misterio, la boticaria medita sobre las deducciones de casos del pasado.